sábado, 22 de marzo de 2008

La mujer y El Matrimonio

De acuerdo con el Islam el espíritu verdadero de la vida marital es: conocimiento, amor, compresión y respeto mutuo. Son muchas las palabras del CORAN y de la Sunna del Profeta, que prescriben dentro del matrimonio, la consideración y la justicia, la compasión y el amor, la simpatía y la benevolencia, la paciencia y la buena voluntad. El Profeta, la paz de Dios Sea con él, nos dejó varias recomendaciones a este respecto, Dijo: El mejor musulmán es aquel que mejor se comporta con su familia y con su esposa e, igualmente, dijo: que el mayor y más bendito gozo de la vida se encuentra en una esposa buena y recta. En la comunidad Islámica, el matrimonio trae consigo derechos y obligaciones. Los deberes y derechos son de ambos esposos. No existe en el Islam ninguna discriminación entre hombres y mujeres: ambos son creaciones de Dios. El uno hecho para la otra. Es como decía el Profeta: Hombres y mujeres, constituyen cada uno, una mitad que necesita de la otra para conformar un todo.

En su forma, el matrimonio islámico es una ceremonia sencilla. No se requiere de ninguna formalidad especial, se puede hacer en cualquier lugar y momento. Las únicas exigencias son: Que los contrayentes declaren de viva voz su deseo de unir sus vidas y que se haga ante dos testigos. E, igualmente, por mandato de Dios, el novio debe enaltecer a su futura esposa con un regalo como símbolo material de su amor.

En lo concerniente a su contenido y significado, el matrimonio para la comunidad Islámica es un fuerte vinculo y un compromiso con el Creador del Universo, con la vida misma: representa la supervivencia, la convivencia y la superación de la raza humana y el sosiego y deleite de los esposos. En el matrimonio estos encuentran la propia realización y satisfacción mutua.

En el matrimonio, hombre y mujer encuentran el amor y la paz. Encuentran la compasión y la serenidad. En el matrimonio, hombre y mujer, encuentran el bienestar y la esperanza. El compromiso matrimonial, antes que un compromiso entre los futuros esposos, es un compromiso con DIOS, EL ETERNO, EL DIOS UNICO, el que todo lo ve y todo lo sabe: Hombre y mujer deben estar plenamente convencidos del compromiso que asumen y su intención debe ser la de conformar una unión permanente y una familia en el camino de Dios. El Profeta, la paz sea con él, dijo: “ ¡ Malditos sean !, los hombres y las mujeres que gozan cambiando frecuentemente de cónyuge.”

El marido contrae, con Dios y con la sociedad, el compromiso moral de tratar a su mujer con amabilidad, honor y paciencia. Es deber suyo, el mantenerla honradamente y no causarle aflicción o daño alguno, ni físico ni moral. El marido debe cumplir sus deberes alegremente, sin reproche ni injuria y buscando, siempre, la complacencia de Dios. Dichas obligaciones debe procurar cumplirlas de manera digna, sin extravagancia, ni tacañería y sin descuidar las otras tareas que le impone la vida matrimonial y los demás asuntos del hogar. La ley de Dios, manda al marido tratar a su esposa con justicia, respetar sus sentimientos y hacerla objeto de gentileza y consideración. La relación matrimonial debe ser armónica y en ella debe reinar la paz y la alegría.

En su último discurso, el Profeta, la paz y las bendiciones de Dios sean con él, Dijo:

“ ! Vosotros ! Tenéis derechos sobre vuestras esposas y vuestras esposas tienen derechos sobre vosotros. Tratad a vuestras esposas con amor y gentileza. En verdad las habéis tomado como un encargo de Dios y las habéis hecho legitimas por las palabras de Dios. Sed siempre fieles al encargo que se os confía y evitad los pecados.”


1 comentario:

Anónimo dijo...

me parece que ya es tiempo que a la mujer se le de el respeto, lugar y sobre todo amor que merecen.
http://www.hogaryfamilia.com